Montañas en la tierra media

Es descorazonadora la cantidad de gente que viene a mis cursos o charlas con hambre en los ojos, con necesidad de cambiar las cosas, angustiados, presionados, sobreviviendo en entornos corporativos agresivos, corruptos y desmoralizadores. Pero es igualmente descorazonador que mucha de esta gente, cuando se les presentan las raices y principios en los que se basan sus males y las herramientas y líneas de acción encaminadas a reducirlos o eliminarlos, responden sistemáticamente con el “Yapero”.

“Ya, pero es que nuestros proveedores nos engañan”. Pues controla a tus proveedores. O mejor, cambia de proveedores. “Ya, pero es que todo el mundo hace lo mismo”. No, todo el mundo no. Y si todo el mundo hace lo mismo, tendrás que cambiar el mundo. “Ya, pero es que no nos dejan cambiar de proveedores”. Insisto: cambia la forma en que trabajan tus proveedores. “Ya, pero es que no quieren”…

Lo gracioso es que luego vas a trabajar con esos mismos proveedores y se repite la historia. “Ya, pero es que el cliente nos cierra alcances, tiempos y dinero”. Pues diseña y gestiona buffers de proyecto. “Ya, pero es que ni con buffers cuadra el proyecto”. Pues entonces estás perdiendo dinero y no deberías coger ese proyecto. “Ya, pero es que si cogemos este proyecto, aunque perdamos, luego podemos coger otros más jugosos”. No creo que comenzar una relación de negocios con abusos de poder y pérdidas económicas establezca un buen precedente. “Ya, pero es que si no lo coge la competencia”. Si la competencia pierde dinero, mejor para tí. “Ya, pero es que entonces nosotros nos quedamos sin clientes”. Hay millones de empresas en todo el mundo. Sal de tu terruño y búscate la vida. “Ya, pero es que para eso hay que saber inglés”. Aprende inglés. “Ya, pero…”

Ya hablé de esto con la parábola del mago del método. Y ahí estamos todos. Con picos y palas a nuestro alcance, quejándonos toda la vida de la montaña que se alza en la tierra media entre clientes y proveedores. Pero nadie mueve un dedo. Nadie pica la montaña. Nadie se pone a cavar un tunel. Nadie.

O casi. ;-)

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7 respuestas a Montañas en la tierra media

  1. Grego dijo:

    Hola Ángel, como siempre el artículo me ha parecido genial. Creo que es muy habitual que prefiramos quejarnos que hacer algo. No se soluciona nada, pero parece que consuela.

    Hace poco leí un artículo de Pilar Jericó, en el que pone una frase que viene al caso: “siguen culpando el sistema, cuando han estado durante años haciendo y repitiendo lo mismo”.

    Un abrazo.

  2. Alex dijo:

    Amen amigo! Aish… si es que un día podíamos hacer un libro con las anécdotas :PP

    Te miseamos en Madrid, a ver cuando vienes a vernos!

  3. miguel angel dijo:

    El miedo al cambio es algo natural al ser humano, y cuanto más tiempo se permanece bajo unas reglas establecidas más duro es.
    Admito, no sin cierta vergüenza, mi yaperismo aunque me exijo cada dia corregirlo solo un poco y es mucha la energia necesaria para corregir tu propio yaperimo, e inimaginable la que se necesita para corregir el de otros.
    Excelente entrada, un saludo!

  4. Sergio Montoro Ten dijo:

    Ya pero, es que entonces haciendo lo que tu dices no podría seguir quejándome. Y a mi me gusta quejarme.

  5. Ergow dijo:

    Me gusta el concepto. Si tienes clientes con los que pierdes dinero, mejor déjalos para la competencia. Muy inteligente!!

  6. Ergow, ese concepto se menciona en “La semana laboral de 4 horas”, de Timothy Ferris. A lo mejor te interesa echarle un vistazo.

    Ángel, transmites un poco de desesperanza con este post. La esperanza es lo último que se pierde!!! Ya, pero…. ;)

  7. Barbitúrica dijo:

    (Sólo para contrarrestar el desánimo de esta entrada me he decidido a escribirte…)

    Ya, pero es que hay muchos otros que siguen si que cogen pico y pala y hala, a darle todo el día.Y a pegarse con los proveedores.

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